Acurrucada en la cama, rodeada de nueve cojines que me protegen de la soledad de mis pensamientos, cierro los ojos y empieza mi viaje.
De fondo se escucha al sedoso y agradable piano de Chopin.
Intentando des-entramar las incógnitas de mi mente me doy cuenta de algo: tengo todo lo que cualquiera pudiese desear. ¿Por qué pedir más? La respuesta es obvia, sin objetivos la vida no tendría ningún sentido. Tengamos lo que tengamos, no sabremos apreciarlo lo debido, porque siempre querremos lo no conseguido.
Noches locas en locales oscuros y plagados de gente de Madrid, bailando flamenco cuándo de fondo suena una canción Pop-rock o abrir espacio entre la multitud para montar nuestro "Tablao flamenco", miradas perplejas ante tal infantilismo. No creo que dejar que nuestro niño libre haga lo que quiera sin molestar a los demás, sea una inmadurez. ¿Qué es la edad sino un número sin sentido? ¿Es quizá más legítimo intoxicarse el cuerpo con litros de alcohol teniendo cómo único objetivo dejar a un lado tu sombra y desinhibirte?
No pongo barreras a mi imaginación ni a mi libertad. Bailar, mover todas las articulaciones de mi cuerpo, reírme de mi misma, disfrutar de la compañía... son cosas que me revitalizan y que me hacen ver que la vida es lo mejor que me ha pasado nunca.
NO me importa tener momentos estruendosos o haberlos tenido y recordarlos a veces con cierta amargura, si luego pienso en la experiencia que me han dado y en los errores que van a evitar o que están evitando que cometa ahora.
Mentiría si dijera que mi adolescencia ha sido fácil, parece cómo si mi Peter Pan nunca me quisiera abandonar, y me refugiaba en los recuerdos de una infancia enternecedora. Me costó dejarlo atrás y admitir que uno tiene que crecer y salir de ese mundo de algodones en el que se encontraba tan a gusto.
Darte de golpe con la realidad a veces es duro y más si no estás preparado.
-El pasado es un Prólogo-
Me quedo sólo con lo aprendido, y con los dulces momentos que pasé qué me hacían olvidarme durante unos instantes de los más amargos. Aprender a ser fuerte no es tarea fácil, sabiendo además que están esperando a ver cuál es tú debilidad para ir a por ella. Que hablen bien o mal de ti, en el fondo ¿qué más da? eso sólo significa que existes.¿No tienes enemigos? ¿Es que jamás dijiste la verdad o jamás amaste la justicia? No pienso caer en el error del murmúrio y del embuste, pero aquel que caiga, caerá más bajo todavía.
"El amor de los jóvenes no está en el corazón sino en los ojos"- Shakespeare
To me, la belleza es solo el encanto de un instante, en seguida se vislumbra el sucio polvo de un corazón que aún no ha encontrado su camino. Cada cosa tiene su belleza pero no todos podemos verla.
Aunque lo desee jamás entenderé lo que es verdaderamente el amor, pero si que me hago una cierta idea de lo que es la amistad. Esos a quiénes todos llamamos "amigos" y que luego no nos ayudan cuándo más los necesitamos... NO les tengo rencor, creo que puedo diferenciar entre amistad y AMISTAD.
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