Cuando menos te lo esperas, todo empieza a encarrilarse de nuevo:
el sustento de los que parecían no existir, la emoción de los que te dicen que "hablas muy bien, eres muy educada, respetuosa, y que jamás se han alegrado tanto de haberme elegido como delegada", eso me aporta energía para seguir, y un correo de tu profesora de Introducción a la Economía diciéndote que "le ha sorprendido mucho tu nota y quiere verte para comprobar el examen de nuevo", ya es la gota que hace rebosar la botella de agua.
Por fin vuelvo a tener ánimo después de un día fastidioso como el de ayer.
el sustento de los que parecían no existir, la emoción de los que te dicen que "hablas muy bien, eres muy educada, respetuosa, y que jamás se han alegrado tanto de haberme elegido como delegada", eso me aporta energía para seguir, y un correo de tu profesora de Introducción a la Economía diciéndote que "le ha sorprendido mucho tu nota y quiere verte para comprobar el examen de nuevo", ya es la gota que hace rebosar la botella de agua.
Por fin vuelvo a tener ánimo después de un día fastidioso como el de ayer.
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